¿Censura previa o solución contra la telebasura?

¡Hola!
Hoy hablaré no sólo como ciudadana sino como futura periodista (espero).
Nada más levantarme, al poner tele5 (sí, lo sé, tengo delito pero por ello creo que puedo hablar de esto con criterio) me enteraba de la noticia que despertaba una nueva polémica en los medios de comunicación. Aunque mientras debatían sobre ella yo más o menos sabía a qué hacían referencia pues sus antecedentes los vimos en clase el año pasado, no he dudado en dirigirme a la Red para buscar más información y poder hacer una crítica con fundamento.
Para quien no sepa de qué estoy hablando, le dejo este enlace: http://www.abc.es/20110118/medios-redes/abcp-vuelve-fantasma-consejo-censor-20110118.html

Es el más completo que he encontrado y como es una noticia en la que el rey ni pincha ni corta, creo que ABC puede ser el más neutral en temas de este tipo jaja

El caso es que hace ya tiempo se creó un Consejo, unas leyes, que regularían el sistema de medios: respeto hacia el horario infantil, que no se atente contra los derechos humanos, que no se enseñaran contravalores...
Este organismo y esta ley se hizo para ello, con mayor hincapié en Cataluña donde habría un mayor control, pero se sabía que tarde o temprano llegaría a España...
(os lo explico x encimilla para los que no tengan ganas de leer)
Y ahora el debate está en que tras la proclamación de un nuevo Consejo que pudiera intervenir en los contenidos televisivos, ejerciendo un mayor control, se preguntan todos si esto no es censura previa o limitación de la libertad de expresión. ¿Y quiénes son los que han puesto el grito en el cielo? Telecinco.

Ahora os comentaré mi opinión.
Como periodista (futura) siempre lucharé por una libertad de expresión, siempre. Pero tal y como decían mis apuntes de ayer: "Ese derecho fundamental a expresarse y a recibir información veraz no es absoluto, ni ningún comunicador o medio de comunicación tienen una patente de corso para estar por encima de otros derechos que privan sobre éste". Y eso es lo que está ocurriendo últimamente en la mayoría de cadenas, sobre todo las privadas y, por encima de todas, en las que abundan en su parilla programas de corazón. Entonces estaríamos hablando de que la libertad de expresión, a veces, viola otros muchos derechos de los ciudadanos en ESTOS PROGRAMAS. Por lo tanto, vería conveniente que un Consejo regulador formado por periodistas y no por políticos, regularan no el contenido, sino los valores que transmiten dicho contenido, velando por el derecho y libertad de todos los ciudadanos (espectadores y periodistas) y persiguiendo el cumplimiento de la ley (horario infantil, intimidad personal, etc...).
Por lo tanto, no estoy de acuerdo con ninguna posición. Es obvio que la televisión no puede alcanzar los puntos a los que está llegando, porque más que un medio de comunicación se está convirtiendo en una violación a los derechos fundamentales y, aunque la tv se haya definido siempre como "el medio espectáculo", cualquier espectáculo tiene una dignidad, invisible en este caso. De este modo, está claro que hay que luchar contra eso, pero no ejerciendo un control de los medios de comunicación, algo que atentaría contra el principio fundamental de la existencia de éstos y que nos trasladarían de nuevo a épocas ya pasadas y de las que tanto renegamos. Si un político, sea cual sea su partido, controla una televisión, no acabará con los contravalores que se emitan, acabará con las ideas contrarias a su ideología, acabará con las noticias que dañen a su persona, partido o intereses económicos y dejará de ser una televisión por y para los ciudadanos, convirtiéndose en una herramienta de propaganda política más. (en mayor medida de lo que ya pueden serlo, claro está).
Pero si en cambio no se hace nada para luchar contra la telebasura, la sociedad seguirá adoptando una serie de contravalores que hará propios y que dentro de un tiempo no identificará como tales, sino que serán parte de una forma de vida que todos considerarán "digna".
Por ello, yo que sí que veo telecinco, soy consciente de que ese tipo de televisión  (de esos programas sólo me gusta Ana Rosa, que más o menos...) supera los límites no establecidos (por desgracia NO ESTABLECIDOS) y que hay que luchar contra ello. Pero quienes tienen que luchar son periodistas, profesionales del mismo sector, con estudios, experiencia y formados en lo que se llama "periodismo serio", aquellos que entienden mejor que nadie lo que es la libertad de expresión, los que son coscientes del derecho a informar sin incumplir otros derechos ciudadanos y los que han experimentado la magia de comunicar. No políticos que, al fín y al cabo, sólo pretenden ejercer una censura previa, para, bajo la premisa de proteger al ciudadano, vender su ideología encubierta.
Tal vez mi reflexión no sirva de nada, pero quería dejar mi visión del tema. Ya que seguramente el sector periodístico ponga el grito en el cielo en contra de esta medida, escudándose en que es una "censura previa", una violación del derecho de expresión y que no se puede consentir. Está claro que no, no se puede consentir que nos priven de algo por lo que siempre hemos luchado, pero tampoco se puede consentir la tv que ahora se hace. Porque si como periodista debes luchar por la libertad de expresión, también debes luchar por una tv de calidad, porque eso NO es periodismo, eso no.