Charlas filosóficas

Hay ciertas personas con las que agradezco hablar por messenger. Son esas que van más allá del hola, qué tal, bien. Son las que por una sola palabra te dan pie a reflexionar, a tener esas charlas filosóficas que te hacen pensar.
Hoy me quedaré con dos frases:
"La felicidad es darse cuenta de que nada es demasiado importante" (Antonio Gala)
"Alguien me dijo una vez que tienes que elegir entre ganar o perder, no puedes tenerlo todo"

Y es cierto. Yo tengo una virtud que hace que se convierta en mi castigo: vivo las relaciones demasiado intensas y pretendo recibir lo mismo que doy. Mi forma de "querer" es la que quiero recibir y obviamente eso nunca es así. Me es imposible entender que si me quieren de otra forma también me quieren. Y no es eso sólo, sino que cuando me doy cuenta por enésima vez que no puedo tener ese pensamiento, sigue doliéndome igual que el primer día.


No sé amar de otra forma, ni sé sentirme querida sino es de la forma que quiero. Y hoy es uno de esos días que me encantaría estar rodeada de palabras bonitas, de caricias y de mimos. De que me digan mil te quieros o mil y un: qué buena amiga eres...


Me encantaría no tener que necesitarlos para ser feliz, pero desgraciadamente el amor es mi motor (motor amor) y si por unos instantes creo que falla, mi corazón se detiene y se está un poquito depre...Como es el caso de hoy.


En fín.


No se puede tener todo. No puedes hacer feliz a todo el mundo. Pero me niego a dejar de tomarme tan en serio a las personas. Para mí no hay nada más importante en el mundo que las relaciones y estoy dispuesta a "sufrir" por ello. No dejaré de ser como soy, pero al menos espero que no me afecten tanto las cosas como me afectan. Porque esto acaba conmigo...


Siento que para ganar algo pierdo mil cosas y que esta no es la vida que quería...


Pero bueno... Creo que estar un poquito triste ya hace que me planteen demasiadas cosas que no me gustan de mí o de lo que me rodea...

Me voy a la cama que es mejor dejar de pensar que así no se puede!