jueves, 4 de noviembre de 2010

¡Tenemos el nombre!¿y el apellido?

Desde hoy, hay que añadir una disputa más al periodo del embarazo. Y es que con la nueva ley, ya no sólo habrá que ponerse de acuerdo en el nombre de pila: que si Ana, María, Paco, Juan...Ahora también hay que decidir qué apellido irá primero: el de la madre o el del padre. La reciente legislatura da la posibilidad de que el apellido de la madre preceda al del padre, dando a ambos la misma oportunidad a la hora de continuar con "su legado". Lo mejor es que la igualdad no acaba ahí. No sólo podremos poner uno u otro, según decidamos, sino que si no nos ponemos de acuerdo, lo decidirá el orden alfabético. Sin discriminaciones. Una ley totalmente justa e igualitaria, ya que, en otros tiempos, seguramente en caso de disputa hubiera prevalecido el apellido del varón.

Venía escuchando desde hace bastante tiempo esta posibilidad, pero creía que se quedaría ahí, en un simple rumor o proyecto que no se llevaría a cabo. Por tanto, estoy muy, muy contenta y orgullosa de que se haya aprobado tal ley que, al fin y al cabo, es un paso más hacia la igualdad. Hacia dejar atrás absurdas costumbres que ya no tienen sentido.

El próximo paso es eliminar tajantemente el término: "señorita", pero bueno, eso ya es otro tema.


De momento, pienso informarme del proceso de cambio de apellido, si puede ser sólo al registrarse o con la mayoría de edad puedes elegir que tu apellido sea el de tu madre o padre. Ya que si es así, pronto diré adiós a García y daré la bienvenida a Pinzón como primer apellido! =)


¿Y vosotros? ¿Os cambiaríais el orden? ¿Cuál de vuestros apellidos os gusta más?

2 comentarios:

  1. A mí me parece una tontería que después de tantísimos años ahora lo quieran cambiar...
    Yo dejaría el orden de apellidos como están,me gustan :)
    Un besito.

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  2. Yo no creo que me cambie ni los apellidos ni el orden.
    No por nada, ni por alguna razón, si no porque antes me cambio mi nombre. xD
    Verás, es que a mi siempre me llaman por el diminutivo de mi nombre y cuando nací no podían registrarme con ese diminutivo.
    Pero ahora ya está solucionado, así que cuando cumpla los 18 me lo cambiaré al diminutivo.
    Odio mi nombre del DNI y el Pasaporte.

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